top of page

Aula arqueológica: Aguilafuente

El hallazgo de la villa tardorromana de Santa Lucía en la localidad segoviana de Aguilafuente, y en especial de sus abundantes mosaicos, justifican la creación de esta aula. La iglesia románica de San Juan Bautista que se hallaba sin culto y en estado ruinoso, da cobijo a una notable aula que intenta y consigue que el visitante obtenga una idea cabal de lo que pudo ser la vida cotidiana en la mencionada villa.

Se inicia la visita por una especie de túnel del tiempo titulado “Hacia el mundo romano”, que nos lleva del siglo XXI al IV d.C. En esta sección, a modo de pasillo, se han colocado los mosaicos del peristilo extraídos de la villa que en general es una composición abigarrada en los que se distinguen cuadrados, hexágonos y nudos de Salomón.

El aula consta de dos plantas: la superior , de pequeña extensión porque aprovecha el espacio del antiguo coro de la iglesia, ofrece, además de una excelente perspectiva general de toda el aula, otro conjunto de mosaicos auténticos  procedentes de la villa, paneles alusivos al hallazgo de ésta y una espléndida maqueta que reproduce una villa ideal. 

La parte inferior se articula en torno al peristilo central de la villa, que combina con maestría elementos reales y pintados.

Una de las secciones está dedicada a  “Los trabajos agrícolas” y a los habitantes de la villa. En ella mediante cinco armarios “humanos” , cincelados con un pantógrafo, se representa cada una de las categorías sociolaborales: un esclavo, una “liberta”, un colono, un pedagogo y una esclava doméstica.

 

 

 

Dentro de los armarios aparecen objetos identificadores de su categoría sociolaboral. A modo de ejemplo, unas tablillas de cera   con sus respectivos stilus se ocultan en el armario del pedagogo. A un lado de la sala una lona de vinilo  representa una escena diaria de los trabajadores y se completa con la reproducción en cartón de dos pastores cuyo rebaño les proporcionaba la lana que sería tejida por un telar romano muy bien reproducido que simboliza las tareas artesanales de la villa.

A continuación se accede a la sala noble,  el oecus. En ella hay tres arcones iluminados que encierran paneles informativos y sobre los que más adelante volveremos. En la sala nos encontramos también con un armarium-alacena que guarda reproducciones de la vajilla de lujo en terra sigillata. Se completa con el mobiliario típico de este tipo de recinto: un lampadarium, un triclinium, una mensa auxiliar, una lucerna...

Debidamente protegidos por cristales de seguridad aquí se puede casi literalmente pisar por los mosaicos, con lo que uno puede hacerse una idea bastante aproximada de lo que experimentaban los moradores de la villa al caminar sobre tales alfombras artísticas. En este caso en concreto sobre el llamado de Los Caballos que se encontró en el oecus de la villa de Santa Lucía. Es, que sepamos, el único caso de Aula Arqueológica que muestra restos artísticos de importancia procedentes del yacimiento cercano.

Tal y como se aprecia en esta misma fotografía, al fondo de la zona noble, se ha aprovechado la capilla bajo la torre como sala de proyección y, así mismo, de exhibición vertical de mosaicos.

Termina la visita con una sala, dedicada de manera monográfica, a los visigodos, concretamente a su necrópolis en la que se aprecian los ritos de enterramiento y la reproducción muy lograda pero con una fidelidad un tanto macabra de una tumba con los objetos de adorno personal que acompañaban al difunto. 

bottom of page